LUNA DE MIEL: A BRASIL LOS PASAJES!!!

Como ya casi todos saben, Enrique y yo nos conocimos en el Nordeste brasilero hace casi 3 años y medio... Por esta razón es que decidimos volver allá para festejar nuestra Luna de Miel.

Quisimos terminar nuestro viaje en Jericoacoara, la primera playa del viaje anterior y donde aún no nos habíamos conocido. Siempre recordamos esta playa como la más linda, y siempre tuvimos el sueño de volver juntos.

Esta vez, quisimos cambiar un poco (sólo un poco!) nuestra forma de viajar, dándonos un premio después de tanto estres (sí, casarse es un estres! y casarse en dos países, doble estres!!!), así que decidimos contratar un paquetito con una agencia de turismo. Esto por varias razones, entre ellas, que con todo el tema de la organización del casorio no teníamos tiempo de realizar las investigaciones necesarias, además de querer tener un nivel de transporte y alojamiento un poquito mejor que el acostumbrado.

Como somos una pareja RE moderna, contratamos el paquete por internet, arriesgandonos a la no existencia de la agencia en el lugar de destino. Por supuesto, llegamos a Sao Luis, la primera parada, y no habia nadie esperandonos en el aeropuerto..... Obvio! no?! Pero bueno, los turistas éramos pocos, y encontramos un cartel con nuestro nombre en la oficina de informes... Habían ido a buscarnos, pero ya se había ido... Por lo menos, la empresa existía!!!!!!!!!

Sao Luis es una ciudad con más de 1 millón de habitantes. Fue una de las primeras ciudades fundadas en Brasil, con un centro histórico muy rico gracias a la com binación de las distintas conquistas que recibió: portuguesa, holandesa y francesa. El hotel quedaba en la parte turística de la ciudad, frente a la playa. De aquí, el viaje transcurrió con relativa normalidad, siempre por debajo de los estándares esperados, tardanzas e incomprensiones... Bien al ritmo brasilero, pero a precio internacional.

Lo más lindo fue el Parque Nacional Lençois Maranhenses, que se encuentra en un lugar medio dificil de llegar, al borde del mar, con varios kilómetros de dunas de arena blanca. Desde el último pueblo, se comienza a recorrer los 20 km que lo separan, rodeados de verde vegetación exhuberante. De repente (literalmente) la vegetación termina y empiezan las dunas. Presten atención a la línea que separa estos ecosistemas locos. Lo otro impresionante, es que durante el verano llueve bastante en estas dunas, y se forman unas lagunas de tempratura muy agradable, color entre verde, turquesa y azul, donde nos bañamos! Impresionante...

Finalmente, en Jeri decidimos extender nuestro viaje, ya que no podíamos pensar ni siquiera en regresar al frío que hacía en Baires (tengan en cuenta que las tempraturas durante el día eran 35º y en la noche 25º, con sensaciones térmicas de 5º más en cada momento).

También hicimos escalas en Sao Paulo, donde Virginia, Arthur y la familia nos recibieron muy amablemente, y en Santos (el puerto que queda a la misma altura que Sao Paulo en la costa) donde también fuimos muy bien recibidos por Joao, Alsina y Kiko.

Los que tengan dudas, pueden dejarme comentarios aquí mismo. Espero que disfruten estos videitos!!!

Saludirijillos!!!

Solapinha